El Estado paraguayo, en su firme compromiso por garantizar una vida digna para las niñas, niños y adolescentes trabajadores dio un paso histórico al asegurar un entorno legal y social, de trabajo digno que promueve su desarrollo y bienestar, al tiempo que erradica la violencia, explotación y discriminación de sus vidas. Este esfuerzo se extiende tanto a las áreas rurales como a las urbanas, reconociendo el valioso aporte de las niñas, niños y adolescentes trabajadores a sus familias, comunidades y al país.
En una declaración, la ministra de Trabajo, Empleo y Seguridad Social, resaltó la importancia de esta iniciativa para el presente y el futuro de Paraguay y sus niñas, niños y adolescentes trabajadores.
“En este Paraguay, las niñas, niños y adolescentes trabajadores pueden desarrollarse, estudiar y crecer felices, sin desigualdades, con todos sus derechos garantizados”, afirmó con emoción la ministra. Esta declaración refleja el firme compromiso del gobierno nacional para asegurar que ellas y ellos tengan igualdad de oportunidades.
Para el Estado paraguayo, el concepto de trabajo va más allá de la mera actividad económica. Se ve como una acción humana que dignifica y promueve el cuidado de la madre tierra. El trabajo, además, tiene un componente educativo, permitiendo a las niñas, niños y adolescentes trabajadores adquirir habilidades y conocimientos esenciales para su crecimiento personal. También, se reconoce su componente político, ya que les brinda la oportunidad de participar activamente en la lucha contra las desigualdades, tomando decisiones importantes en sus familias y comunidades, y tambíen su componente histórico, pues nuestras naciones conservan las prácticas ancestrales, en las que todos y todas las integrantes de la comunidad son agentes sociales activos, en todas las etapas de su vida.
Este enfoque integral hacia el trabajo marca un hito en la historia de Paraguay y establece un ejemplo para otras naciones que buscan garantizar un futuro digno para la niñez y adolescencia. Con esta visión, Paraguay está dando pasos firmes hacia un futuro donde ellas y ellos tendrán la oportunidad de crecer y desarrollarse plenamente, con un trabajo digno que no comprometa su bienestar ni su futuro.